Hwa Rang Do significa: El camino del florecimiento de la naturaleza humana.
En el siglo VI, cuando Corea estaba dividida en tres reinos: Koguryo, Paekche, Silla; el mayor de los tres, Koguryo, intentó tomar mediante las armas a los otros dos reinos. El reino de Silla, el más pequeño, fue defendido por un grupo de jóvenes caballeros aristócratas que junto a la clase guerrera se entrenaban en las artes marciales y en la lucha cuerpo a cuerpo para la protección de su reino.
Los militares de la dinastía Koguryŏ desarrollaron un arte marcial basado en diversos estilos chinos, pero adaptados a sus propias necesidades. Era un estilo que daba mucha importancia a las patadas en lugar de a los puños. Este estilo de defensa personal sin armas es el denominado Taekkyon.
Posteriormente, la dinastía Silla unificó los reinos después de ganar la guerra contra el reino de Paekche en 668 y contra el de Koguryŏ en 670. El Hwarang desempeñó un papel importante en esta unificación.
Las raíces de lo que es ahora conocido como Hwa Rang Do comenzaron sobre 2000 años atrás y continuó a través del periodo Dinástico Silla y la dinastía Koryo. Inicialmente, la gente joven, de que posteriormente llegaría a ser Corea, se reuniría en grupos para probarse ellos mismos y con otros. Esos diminutos grupos unificados de gente joven los predecesores de la Hwa Rang.
Los Hwa Rang eran grupos organizados de jóvenes los cuales fueron a las montañas, ríos y otros lugares de natural belleza a aprender a desarrollar la paciencia, control emocional y mental, pretensiones artísticas acopladas con entrenamiento de artes marciales. A través del desarrollo de la fortaleza mental, entrenamiento físico y espiritual ellos eran enseñados a actuar como modelos de cultos y caballerosos guerreros. Ellos eran los guerreros de elite de Silla, eran hombres jóvenes quienes ejemplificaban el guerrero-intelectual que influenció la historia coreana por muchos siglos.
Además de instrucción religiosa, se enseñaba el baile, la literatura, las artes y las ciencias. Ellos estaban enseñando también el arte del combate, ballestería, conocimientos de defensa personal etc. Basado sobre el concepto de la unidad de opuestos, las técnicas de pelea sin armas eran conocidas por sus mezclas de lo duro y lo suave, circular y lineal de sus ataques. Un puñetazo lineal podría quebrar la armadura de madera de un oponente y matarlo instantáneamente. Ellos podían patear a tales velocidades que sus enemigos pensaban que los pies de los guerreros Hwa Rang eran espadas.
El feroz espíritu de pelea de los guerreros Hwa Rang llegó a ser legendario, y sus hazañas fueron registradas para la posteridad en la poesía y literatura Hwa Rang. Las narrativas de estos jóvenes guerreros de la dinastía Silla llegarían a ser la base de la clásica novela que formó la columna vertebral de la literatura coreana por cientos de años.
Para guiarse y dar principios a su caballerosidad, incorporaron un código de cinco puntos sobre su conducta, estos puntos eran muy importantes y debían seguirse, de lo contrario causarían la deshonra de los guerreros y posteriormente su muerte.
• Ser leal a tu rey
• Ser obediente con tus padres
• Ser honorable con tus amigos
• Nunca retroceder en la batalla
• Si debes matar, hazlo con justicia (es mejor la omisión de la violencia)
Muchos de estos bravos luchadores murieron en los campos de batalla en el umbral de su juventud, tan jóvenes como de 14 ó 15 años de edad. Sin embargo, a través de sus proezas inspiraron a la gente de Silla, a elevarse y unirse. Por las victorias de Silla, la península de Corea se unió por vez primera en su historia.
En el deporte actual seria bueno buscar el revivir a los antiguos caballeros florecientes en los nuevos taekwondoines, ya que ahora el taekwondo no es solo un arte marcial de contacto, el taekwondo lleva en su interior las bases del respeto y coraje así como el desempeño emocional; el no darse por vencido en un combate deportivo, en un entrenamiento duro o en una patada que no podemos hacer; muchas veces e creído que el coraje y perseverancia son rasgos importantes que nos caracterizan y nos distingue de los demás.
Hoy en día el antiguo código de estos jóvenes caballeros podría considerarse como obsoleto, pero a mi apreciación, este código es la mejor guía para no solo hacer a un taekwondoin honorable si también para forjar a un hombre recto y justo.
• Ser leal a tu rey.
Según nuestra forma de gobierno, nosotros no vivimos en una monarquía, sin embargo, somos regidos por un conjunto de leyes y normas que regulan nuestras acciones en la sociedad para que vivamos en armonía. Al estar regidos por estas leyes debemos seguirlas al pie de la letra, vivir y velar para que estas leyes se cumplan para que la sociedad no entre en un caos, esto seria lo equivalente a ser leal a un rey el cual veía por el bien de su pueblo. No podemos erguirnos para comentar que somos practicantes del Taekwondo si no somos capaces de cumplir las leyes, al violentar alguna de ellas se nos es castigado conforme a la gravedad del delito, puede ser desde una multa, trabajo comunitario y en el mayor de los casos podemos ir a la cárcel. En la época de los Hwarang la traición a su rey era lo equivalente a rebelión contra el estado y se les era acusados como traidores de la nación y en tales casos los acusados eran desterrados o en su mayoría eran ejecutados. El rey es la ley, la ley unifica al pueblo, sin rey no hay ley y sin ella no existe el pueblo en armonía.
• Ser obediente a tus padres.
Este punto era uno de los más importantes para los antiguos caballeros florecientes, ya que en su época, el faltarle al respeto a sus padres, era motivo de deshonra y por lo consiguiente el joven culpable de la acción tenia que morir. La familia es la columna vertebral de toda sociedad, por que con base a ella es como nosotros nos desenvolvemos y actuamos con los demás. Los cimientos de esta columna son nuestros padres los cuales nos educan y nos enseñan los principios del bien y el mal así como también la toma de responsabilidad de nuestros actos. En el deporte somos obedientes con nuestro Sabonim, en la escuela con nuestros profesores y en nuestra casa con nuestros padres, estas personas mencionadas cumplen la función de una autoridad a la cual debemos respeto, y más a nuestros padres ya que son ellos los que nos dieron la oportunidad de venir al mundo. Los tiempos cambian y la realidad se vuelve cada vez mas cruda, los padres jóvenes toman las decisiones erróneas y muchas veces abandonan a su suerte a sus hijos, pero aquellos padres que a pesar de todo nos resguardan y nos sacan adelante aunque solamente sea uno, es motivo de admiración y de gran respeto.
Muchas veces como jóvenes no nos agrada la imposición de reglas y normas que nuestros padres nos hacen, en varias ocasiones nos revelamos contra ellos hasta llegar al punto de encararlos y retarlos, constantemente creemos que ellos están equivocados pero así como una sociedad es conducida mediante normas y reglas para que se viva tranquilamente en ella, nosotros también debemos ser dirigidos de tal manera para no perder el camino y evitar aquellos erróneos de los cuales muy pocos jóvenes salen intactos. La madurez es un rasgo importante y cuando llegamos a ella muchas veces retrocedemos para ver los pasos que ya dimos, y al ver que vamos por el un sendero recto y seguro, recordamos que es gracias a nuestros padres, gracia a aquellos regaños, llamadas de atención, anécdotas y consejos que nos dieron.
• Ser honorable con tus amigos.
Un amigo es aquella persona que siempre esta o trata de estar a tu lado y en la cual puedes confiar plenamente.
El ser leal a esta amistad es el procurar resguardar este tesoro el cual desde tiempos antiguos ha sido una parte importante para lograr grandes cosas, si una persona puede llegar a culminar grandes cosas entonces que podrán hacer dos o más personas que se unen para una finalidad apoyándose una de la otra.
El ser honorable con tus amigos significa el nunca traicionar a un amigo, la amistad es parte fundamental de las personas, el tener alguien con quien compartir tus vivencias, alegrías, dudas y penas. Las personas no pueden estar separadas, una necesita de otra para poder comunicarse y para poder expresar aquellos sentimientos. Entre los amigos se forjan lazos que pueden lograr romper el obstáculo de la distancia y con los cuales las personas se hacen más fuertes cada día gracias al apoyo dado por ellos. La amistad es un tesoro que muy pocas personas llegan a respetar, la traición ha sido el puñal escondido de toda la historia con el cual se asesina la amistad y la confianza, muchas naciones cayeron por la traición e incluso en nuestros tiempos es la base para alcanzar aquello que corrompe a toda persona: El poder.
• Nunca retroceder a una batalla.
Tal vez creamos que ahora, solo los soldados son aquellos que van a las batallas, pero debemos de tomar en cuenta que la vida es una batalla diaria y algo que hizo inmortales a los Hwarang fue su valor y su coraje que no los hizo retroceder. En un poema de los Hwarang nos cuenta la historia de uno de los enfrentamientos entre Koguryo y Silla, un joven caballero fue capturado por un comandante de Koguryo, este comandante sintió una gran admiración por este joven y le dio la oportunidad de rendirse, con ello le perdonaría la vida, el joven no acepto y abandonando su espada se lanzo contra los soldados enemigos enfrentando y matando uno a uno pero finalmente, su pecho fue atravesado por una lanza, el coraje de este joven de tan solo 14 años quedo en la historia; se cuenta que logro matar a casi 60 hombres de Koguryo, él sabia que no podría vencer y que moriría ahí, pero no por ello se rindió.
Una persona normal puede darse por vencido con algo que no puede hacer a la primera, pero aquellos que no se dan por vencidos y siguen intentándolo son los que en esta vida valen la pena y pueden lograr grandes cosas.
“Hay hombres que luchan un día y son buenos, hay quienes luchan un año y son mejores, hay quienes luchan muchos años y son muy buenos, pero hay quienes luchan toda la vida, ellos son los imprescindibles.”
Bertolt Brecht
• Si debes matar hazlo con justicia.
Anteriormente los caballeros no podían tomar la vida de alguien injustamente es decir, en esa época ellos eran los que hacían valer la ley y eran modelos de gran honor, por lo tanto no podían ir matando a cualquier persona, solo podían tomar la vida de un enemigo como respuesta de defensa, o en cuestión de proteger a alguien el cual su persona fuera amenazada.
Nosotros como taekwondoines no debemos usar el arte marcial para beneficio propio ya que con esta disciplina nuestras manos y pies se consideran un arma que puede hacer mucho daño o incluso puede llegar a tomar la vida de alguien, es por ello que solo podemos usar este arte marcial solo para defendernos y solo cuando este en riesgo nuestra vida o el de algún tercero pero solo como defensa y contraataque.